Josef Koudelka aprovechaba los largos y duros meses invernales para recluirse en su estudio y editar sus fotografías. Ahora que llegan otra vez estos meses de tan poca luz, quizás siga el consejo del genial Fotógrafo de Praga. Gracias, mr. Koudelka, por el consejo.
Otro blog de fotografía... y alguna cosa más