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Mostrando entradas de septiembre, 2023

Le Cinque Terre. Una aproximación fotográfica. 2

Reconozcámoslo. Las infraestructuras en materia de satisfacción al turista de estas cinco localidades brillan por su ausencia. Y bien está, porque, ¿cuántos lugares del mundo que reciben millones de turistas al año no desearían poder dar marcha atrás y no tener que ceder al chantaje del visitante? Lo que parece claro es que en Le Cinque Terre no están dispuestos a que sus calles se llenen de franquicias de comida basura o a la instalación de grandes hoteles. Quien quiera esto, que busque fuera. Así, sin tener que ceder a la dictadura del dinero fácil, Le Cinque Terre puede ofrecerse al visitante en toda su belleza y con honestidad. Un tren de Levanto a La Spezia Cuando todas las guías de viaje recomiendan desplazarse entre los pueblos de Le Cinque Terre mediante el tren, por algo será. El Cinque Terre Express es una línea regional que une La Spezia con Levanto y, de paso, todos los pueblecitos del Parque Nacional, de forma muy cómoda. Para los amantes del senderismo, también es posible

Le Cinque Terre. Una aproximación fotográfica 1

  Le Cinque Terre constituye la fachada marítima de la Toscana en Italia. Cinco pueblecitos a cual más colorido y pintoresco, retratados hasta la saciedad no ya por las cámaras de los fotógrafos, sino por los teléfonos móviles de todos y cada uno de sus visitantes. Sus nombres son sinónimo de éxito en las redes sociales: Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso al Mare. El fotógrafo haría bien en centrarse en los más fotogénicos: Riomaggiore, Manarola y Vernazza. Corniglia, al estar algo más apartado del mar pierde algo del encanto de sus vecinos, mientras que Monterosso es una localidad con una gran playa al uso.   Pero, ¿por qué Riomaggiore, Manarola y Vernazza? Pues porque sus calles parecen esculpidas en riscos y sus casas, de mil colores, se encuentran colgadas en acantilados, desafiando la gravedad. El mar penetra en ellos hasta casi alcanzar la plaza del pueblo y, si añadimos unos atardeceres de ensueño, el fotógrafo encontrará servida su particular locura. Luz y